CAPITULO I
Es suficiente leer algún diario, en cualquiera de las modalidades actuales, o escuchar las noticias en las distintas cadenas televisivas, o de radio, para quedarnos cada día más perplejos de lo que nos comunican. Las políticas, hoy no las tocaremos, ya que hay otras, que en mi forma de pensar, son de mayor calado y es lo que hoy me gustaría transmitiros.
No sé si por la cantidad de medios de información, o porque efectivamente la sociedad ha experimentado un cambio, por desgracia a peor, el caso es que nos quedan con el corazón encogido.
La mayoría, suicidios, e incluso de menores, crímenes, violaciones en grupos, acoso escolar, desapariciones de chicas al final asesinadas y presuntamente violadas o al menos habiendo abusados sexualmente de ellas, consumo de alcohol en menores, se dice que con catorce años ya se inicia dicho consumo, en general todo fruto de una violencia, con unas cotas que jamás hubiéramos ni desearíamos haber alcanzado.
Todas estas circunstancias, a las que desgraciadamente, esta sociedad se está acostumbrando, ni siquiera nos sobresaltan, cuando oímos o leemos alguna de estas noticias y las consideramos tristemente como un caso más. Para mí es un tema que creo necesita un análisis y estudio profundo, pero sobre todo, un compromiso por los que pensamos que esto no es correcto para actuar en unión.
Comencemos por la Familia, donde en principio, seria la fuente donde deberían de irse formando los pequeños, tomando los valores y virtudes que sus padres, que le deberían inculcar, para que la respuesta en su edad adulta fueran de lo más satisfactoria posible.
Desgraciadamente la Familia, al menos como la familia media que existía en España, ha desaparecido, por lo que las referencias de los pequeños, necesariamente son otras, a veces niños desorientados por la forma trato con sus progenitores.
De vivir, con tantos divorcios, separaciones en la que los protagonistas de esos divorcio o separaciones, están llenos de rencor, a veces de odio el uno hacia el otro y en medio esos niños, obligados a aguantar vivencias tan negativas para ellos, por fuerza deben de sentir un vacio emocional, revelándose en su interior contra ellos, pero que por su edad no manifiestan abiertamente, esta situación les está generando en la mayoría de los casos, un rechazo que los hace poco comunicativos, su interior está lleno de frustraciones que solo genera una violencia interna, que cada día ira a mas.
Estos niños de los que estoy hablando y salvo muy contadas excepciones, la mayoría de ellos, pasan poco tiempo con sus padres, a veces por problemas de tipo laboral, horarios de trabajo y otros por comodidad de los padres y la falta de sacrificio de los mismos por sus hijos, pues no pueden cambiar el, salir a correr, jugar a pádel, etc. por chalar un poco con sus hijos, conocer sus problemas, guiarlos y aconsejarlo. Pero se conforman con decir “Mi hijo va a uno de los mejores Colegios, o al mejor” ¿Y qué? La educación corresponde a los Padres, los Colegios forman académicamente y ayudan y colaboran con la educación, pero sin los Padres, nada de nada.
Esta destrucción de la Familia, digamos que por un cambio Socio-Político, tiene muchísima pate de culpa la propia Iglesia Católica, que creo no ha sabido adaptarse a los tiempos.
Pasemos a otro punto.
El respeto a los demás:
Fruto de esa violencia interna que en los niños, como decía antes se iba generando, esa violencia les lleva a ignorar el respeto, comenzando por pequeños detalles en la edad escolar, donde cada día el Profesor va perdiendo autoridad y el niño va haciendo cada día mas, lo que le viene en ganas, sin respetar lo mas mínimo a sus compañeros o compañeras, pero al Maestro le han quitadlo la mayor arma que tenia para combatir esto que era su Autoridad.
Si de niños el respeto comienza a faltar, en la adolescencia es difícil gobernar a estos, ya no tan niños, asusta decir y así lo demuestran todos los estudios que se han realizado sobre el tema, que el consumo de alcohol es casi generalizado a partir de los catorce años, bajo el efecto del mismo e incluso a veces mezclados con alguna que otra pastillita, estos pueden cometer las mayores locuras, agresiones físicas brutales, verdaderos combates animados por grupos de ambos contrincantes, que a veces termina en una batalla campal con heridos de consideración. En este estado y creyéndose unos hombrecitos toman a una chica y la violan en grupo, esto está proliferando desgraciadamente.
Del consumo clandestino de alcohol, de estos adolecentes, nos pasamos a lo que se ha llamado la movida o botellones, reunión de miles de jóvenes en los que la única diversión es beber alcohol sin límite alguno y en algunos casos con algún tipo de droga añadida, últimamente los controles que la Guardia Civil de tráfico monta para detectar el grado de alcoholemia, se da la circunstancia que hay más positivos en drogas que en Alcohol. Toda una verdadera pena, la de parte de esta juventud.
Y ojo, hay una minoría de gente joven fenomenal de grandes principio y muy involucrada a que todo vuelva al respeto mutuo, a las buenas costumbres, pero a ellos le es muy difícil tirar de la gran masa, necesitan de nuestra ayuda, no podemos dejarlos solos, hay que echar el resto, cada uno en la medida que pueda, pero no decir nunca, como esto no tiene solución… Pues no, claro que la tiene, hoy como ayer, hay que comenzar por educar desde pequeño, tratar de inculcarles unos verdaderos valores como personas , respeto, dignidad, amor a los demás, ser solidarios, tratar de levantar al que vemos caído etc.
Dejo para otro capítulo sobre este mismo tema todo lo relacionado con la Religión y con la Iglesia Católica.
Reitero no debíamos de seguir cruzado de brazos y seguir leyendo notáis como el suicidio del menor solo hace unos días, cuyo suicidio para mí es un fracaso de la sociedad actual.
Continuara.