"La buena conciencia es la mejor almohada para dormir." (Socrates)

sábado, 6 de octubre de 2012

ALGO PARA TODOS LOS DÍAS: EL ROSARIO


No se trata de repetir lo mismo, al decir las Ave Maria nos dejamos guiar por las manos de la Virgen.

Estamos acostumbrados a ver rosarios colgados en el retrovisor de cada taxi o camión, también es como una moda usarlo en el cuello o bien cargarlo como una pulsera cualquiera. Para muchas personas el rosario es un simple adorno que "se ve bien".

Un santo sacerdote decía: "un buen cristiano va siempre armado de su rosario". No se trata simplemente de llevarlo para que se vea, sino de usarlo.

Lo que nos mueve a rezarlo es el ejemplo, creo que todos hemos visto la devoción de alguna persona cuando reza el rosario. Yo pienso en mi papá, siempre que entraba a su cuarto, estaba haciendo ejercicio con el rosario entre las manos. También he visto a miles de personas rezar el rosario, viviendo con mucha devoción y silencio interior. Porque el rosario es ante todo una oración contemplativa y no puede vivirse si falta el silencio interior.

El rosario es y ha sido durante años la oración que la Iglesia dirige a María. No se trata de repetir lo mismo, al decir las Ave Maria nos dejamos guiar por las manos de la Virgen, meditando los misterios alegres, luminosos, dolorosos y gloriosos.

El Rosario está todo entretejido de la vida de Cristo. Primero se enuncia el misterio, sigue la oración que Él enseñó a sus discípulos, la primera parte del Avemaría, recuerdan las primeras palabras del ángel a María, "la llena de gracia". La segunda parte del Avemaría es como la respuesta de los hijos que, dirigiéndose suplicantes a la Madre, le piden con insistencia "ruega por nosotros los pecadores".

Octubre es el mes del Rosario, mes dedicado a recorrer con María los misterios de la vida de su Hijo. Es sobre todo un tiempo para contagiar a los demás de está oración, como decía el Papa: "para ser apóstoles del Rosario es necesario tener experiencia en primera persona de la belleza y profundidad de esta oración, sencilla y accesible a todos".

Este mes traerá muchos acontecimientos importantes, también celebraremos la memoria del beato Juan Pablo II, un Papa totalmente consagrado a Jesús por medio de María, como lo manifestaba claramente su lema: «Totus tuus». Fue elegido en el mes del Rosario, y el Rosario, que con frecuencia llevaba entre sus manos, se convirtió en su oración predilecta. Ojalá podamos nosotros también llevar con frecuencia en nuestras manos el rosario y dejar que Ella nos conceda decisión y alegría, para "hacer del Rosario nuestra oración de todos los días".
Autor: Mariano Hernández.

 

viernes, 5 de octubre de 2012

DAR PARA RECIBIR

Hubo una vez un limosnero que estaba tendido al borde del camino cuando vio a lo lejos venir al rey con su corona, su capa y sus seguidores.

En eso pensó: "Le voy a pedir, porque los reyes son generosos y de seguro me dará siquiera lo necesario para vivir el día de hoy". Y cuando el rey pasó cerca, le dijo: "Su majestad, ¿me podría por favor regalar una moneda?" Aunque en su interior pensaba que el rey le iba a dar mucho más.

Pero con gran sorpresa suya el rey le miró y le dijo: "¿Por qué no me das algo tú? ¿Acaso no soy yo tu rey?" El mendigo no sabía que responder a la pregunta y dijo:
Pero su majestad, ¡yo no tengo nada, soy pobre!".

El rey respondió: "Algo debes de tener. ¡Busca!".

En su asombro, el mendigo buscó entre las cosas de su pobre morral, y se dio cuenta que solo tenía 5 granos de arroz para comer ese día. Pero se los dio complacido al rey, imaginándose que sus familiares nunca le creerían cuando les dijera que él había socorrido nada menos que al rey.

Complacido el rey dijo: "¡¿Ves como sí tenías?!" Y le dio 5 monedas de oro, una por cada grano de arroz.

El mendigo dijo entonces:

"Su majestad, creo que acá tengo otras cosas", pero el rey le dijo: "Solamente de lo que me has dado de corazón, te puedo yo dar".

Es fácil en esta historia reconocer como el rey representa a Dios, y el mendigo a nosotros. Notemos que el mendigo aún en su pobreza intenta socorrer al rey cuando éste se lo pide.

Ocasionalmente, Dios nos pide que le demos algo para así demostrarle cariñosamente que somos sus hijos y él es el Padre bueno.

Unas veces nos pide ser humildes, otras ser sinceros o no ser mentirosos.

Nos negamos a darle a Dios lo que nos pide, pues creemos que no recibiremos nada a cambio, sin pensar en que Dios devuelve el ciento por uno.

No sé qué te pida Dios en este momento. No lo sé.

Solamente sé, que por lo que le des, te devolverá mucho más, y recuerda no darle solamente unos pocos granos, dale todo lo que tengas, pues sinceramente, VALE LA PENA

jueves, 4 de octubre de 2012

ARBOLES MUERTOS SE RENCUENTRAN CON SU CIUDAD, CON UN CLAMOROSO ÉXITO

Hace unos días escribía en este mismo blog el apoteósico triunfo del grupo Cacereño “Arboles Muertos” en la presentación que hicieron en Badajoz junto al conjunto Pacense Los Play Boys, en la terraza del López de Ayala.
 
El día 23 de septiembre y en su Ciudad, Cáceres, por lo que mas que una presentación fue un rencuentro, vuelven a triunfar clamorosamente. Todos los medios de difusión escrita, hablada e incluso en TV. No dejan e destacar su magnifica actuación, que hizo vivir al pueblo Cacereño la tan añorada por muchos Década de los 60.
 
Les voy a poner a continuación una entrevista en la Televisión Cacereña, realizada a dos componentes del grupo, Celestino Charro y Santiago Pizarro.
 
Antes de adentrarnos en el capitulo Musical, fin de la citada entrevista, quisieras resaltar la gran dosis de humanidad, sencillez y humildad, que en la entrevista demuestran estas dos personas.
 
Celestino Charro, músico ya consagrado, done los haya y con un historial musical a sus espaldas creo que inmejorable, habiendo formados a destacados músicos de hoy, pues habla de todo ello, con la mayor humildad y sencillez, algo que solo suele ocurrir en personas de la gran talla humana de Celestino.
 
Santiago que sin rubor alguno, reconoce que casi ha tenido que empezar de cero tras casi cuarenta años inactivo, lógicamente los posos buenos ahí estaban, para mi creo que al margen de la música, como ya he dicho nos han dado un gran ejemplo de sencillez.
 
En cuanto a la música, con verdaderos artistas, con sus canciones propias y algo que en la entrevista dice muy bien Celestino, no calcaban una canción la versionaban, con lo que le daban su estilo propio, mencionan con gran acierto como uno de los mejores conjuntos de los sesenta setenta a LOS BRINCOS, totalmente de acuerdo en ello.
 
Y sin mas dilación les dejo disfrutar con la magnifica entrevista ya citada, solo me queda darle las gracias por airear y quedar muy alto el nombre de Extremadura y de su querido Cáceres. Un fuerte abrazo a todo el grupo.


VIDEO DE LA ENTREVISTA
 

          

¡GRACIAS, POR HABER DICHO QUE SÍ!


Meditaciones del Rosario. Primer Misterio de Gozo. La Anunciación del Ángel a la Virgen
Eres la misma que habías renunciado a ser madre: del Mesías y de otros posibles hijos, porque Dios te pidió ser virgen. Pero Él hizo que pudieras seguir siendo virgen y que al mismo tiempo fueras madre de Cristo y madre de todos los hombres.

Dios es un ladrón muy singular. Algunos roban y no devuelven. Son la mayoría. Algún ladrón, arrepentido, devuelve lo que ha robado o parte de lo que ha robado. Pero Dios devuelve lo que robó multiplicado al ciento por uno. En ese sentido yo quisiera que Dios me robara todo para aumentarlo al cien por cien.

¡Gracias, por haber dicho que sí!

Un día llamaron a la puerta de una casita de Nazareth. La niña abrió la puerta y escuchó al mensajero que le pedía de parte de Dios: Se solicita una madre para el redentor de los hombres. ¿Aceptas ser su madre?...

Todos los hombres de todos los tiempos, encadenados, infelices, destinados al castigo eterno, rodeaban la casita de Nazareth. Gritaban angustiosamente a la niña inocente y asustada: Di que sí, dilo pronto, y estaremos salvados... La respuesta fue tan sencilla como firme: “He aquí la esclava del Señor, hágase en mí según tu palabra.”
Hoy todos los hombres decimos a aquella mujer: ¡Gracias, madre, por haber dicho que sí.”

Yo me uno a ese coro de voces que le dan las gracias. Santa María de Guadalupe es el nombre de aquella maravillosa Niña que nos fue quitando las cadenas de las manos y las cadenas dela cuello; la que no-s ha abierto a cada uno las puertas de la gloria, hasta el punto de ser invocada como “Puerta del cielo”. Hay que decirle con el corazón: ¡Gracias, Madre, por haber dicho que sí”


El sí de María

María es un alma de aceptación: Pasó por el susto, la sorpresa y la alegría del llamado como tú. Dijo sí con unas palabras hermosas que eran su fórmula de consagración”:He aquí la esclava del Señor...” En esas palabras había entrega total, confianza plena, amor muy hondo...¿como tú?

Alma que alimentaba el amor y vivía del amor en su vida.

Una lámpara en que reponía el aceite, una hoguera en que renovaba la leña para alimentar la llama. El aceite era la oración rica, jugosa, apasionante...¿cómo tú?. Y el sacrificio por amor la leña de la hoguera. Todas las cosas que hacía llevaban un sello: Amor a Dios. Todo era razón y motivo para amar: una escoba, un puchero, un cántaro.¿Para ti también?

Vivía de amor; era su respiración, su vida, su sentido. Sin el amor a Dios, a su hijo, a san José, a las almas, su vida no era nada... ¿cómo tú?

Y María era feliz en medio del dolor, del trabajo, de la sencillez de su vida. ¿Cómo tú?

Alma que de su consagración hizo su vida, su por qué, su alegría.

Demostró que una vida entregada a Dios por amor es una vida hermosísima, muy valiosa, muy rica, digna de imitarse. Tú eres uno de esos imitadores, imitadoras... Tienes que seguir demostrándote a ti y al mundo que tu vida dedicada a Dios y a los hombres es muy hermosa, valiosísima, riquísima, digna de vivirse e imitarse.
Autor: P Mariano de Blas LC.

miércoles, 3 de octubre de 2012

NUESTRO ÁNGEL DE LA GUARDA

Necesitamos renovar nuestro trato afectuoso y sencillo con nuestro ángel de la guarda que está a nuestro lado y nos ayuda de mil modos.
Muchos tienen la costumbre de hablar con su ángel de la guarda. Le piden ayuda para resolver un problema familiar, para encontrar un estacionamiento, para no ser engañados en las compras, para dar un consejo acertado a un amigo, para consolar a los abuelos, a los padres o a los hijos.

Otros tienen al ángel de la guarda un poco olvidado. Quizá escucharon, de niños, que existe, que nos cuida, que nos ayuda en las mil aventuras de la vida. Recordarán, tal vez, haber visto el dibujo de un niño que camina, cogido de la mano, junto a un ángel grande y bello. Pero desde hace tiempo tienen al ángel “aparcado”, en el baúl de los recuerdos.

De grandes es normal que hablemos a los niños de su ángel de la guarda. Nos sería de provecho pensar también en nuestro ángel que está a nuestro lado y nos ayuda de mil modos.

Es verdad: Dios es el centro de nuestro amor, y a veces no tenemos mucho tiempo para pensar en los espíritus angélicos. Podemos, sin embargo, ver a nuestro ángel de la guarda no como una “devoción privada” ni como un residuo de la niñez, sino como un regalo del mismo Dios, que ha querido hacernos partícipes, ya en la tierra, de la compañía de una creatura celeste que contempla ese rostro del Padre que tanto anhelamos.

Necesitamos renovar nuestro trato afectuoso y sencillo, como el de los niños que poseen el Reino de los cielos (cf. Mt 19,14), con el propio ángel de la guarda. Para darle las gracias por su ayuda constante, por su protección, por su cariño. Para sentirnos, a través de él, más cerca de Dios. Para recordar que cada uno de nosotros tiene un alma preciosa, magnífica, infinitamente amada, invitada a llegar un día al cielo, al lugar donde el Amor y la Armonía lo son todo para todos. Para pedirle ayuda en un momento de prueba o ante las mil aventuras de la vida.

Necesitamos repetir, o aprender de cero, esa oración que la Iglesia, desde hace siglos, nos ha enseñado para dirigirnos a nuestro ángel de la guarda:

Ángel del Señor, que eres mi custodio,
puesto que la Providencia soberana me encomendó a ti,
ilumíname, guárdame, rígeme y gobiérname en este día.
Amén
.
Autor: P. Fernando Pascual LC.

martes, 2 de octubre de 2012

Receta para resolver los problemas

Los problemas tienen todos algo en común, y es la forma en que se logra solucionarlos. La receta es la misma, bien sencilla.

Desde siempre existen los problemas. El primero que conocemos es el del pobre Adán luego de comerse la manzana. De ahí en adelante tuvo una vida muy, pero muy dura, condenado a ganarse el pan cada día con el sudor de su frente.

Y resulta que los problemas son el pan nuestro de cada día. Para muchos el problema es qué ponerse porque tiene mucho de dónde elegir, y para otros es qué ponerse porque apenas tiene la ropa que lleva encima.

Los problemas tienen todos algo en común, y es la forma en que se logra solucionarlos. La receta es la misma, bien sencilla. Una anécdota -que estoy seguro muchos ya la conocen-- nos servirá para explicarla:

Se cuenta que en el parque de cierto pueblo se hizo necesario tumbar un enorme roble, al que le había caído una extraña plaga que lo convertía en un verdadero peligro público, temiendo se cayera o contagiara a los demás árboles.

Se hizo todo lo posible por salvarlo. Los vecinos estaban muy tristes ante su impotencia. No es fácil definir la causa de un problema, y no menos fácil es tomar la decisión de solucionarlo.

Una mañana llegaron los obreros con sierras automáticas y hachas. Todos se congregaron en la plaza para presenciar el derrumbe del viejo árbol, excitados ante el inmenso estrépito que produciría su caída. Todos suponían que los hombres empezarían cortando el gigantesco tronco principal por el sitio más pegado al suelo. Pero fue todo lo contrario. Colocaron escaleras y comenzaron podando las ramas más altas.

Y así, desde arriba hacia abajo, fueron cortando desde las más pequeñas hasta las más grandes ramas, quedando al final tan sólo el tronco central. Un rato después, aquel poderoso roble se encontraba en el suelo, cuidadosamente cortado a pedazos. El sol cubría esplendoroso el centro del parque. Ya no había sombra: era como si nunca hubiera estado allí, era como si no hubiera tardado más de medio siglo en crecer....

Uno de los obreros explicó que de haber cortado el árbol cerca de la tierra y antes de quitar las ramas, se hubiera vuelto incontrolable, produciendo grandes destrozos en su caída. Es más fácil manejar un árbol cuanto más pequeño se le hace.

Aprendamos. Tenemos que podar primero los pequeños obstáculos para ir llegando al tronco principal de nuestras preocupaciones. Quitar primero las ramas una a una. Ocuparnos, no preocuparnos. Reconocer nuestros errores. Tener el valor de enfrentarlos. Establecer las prioridades. Tener claros los objetivos en la vida. Librarnos poco a poco de todo el peso que nos impide trabajar, crecer, disfrutar, vivir.

Concluye la anécdota afirmando que no siempre resulta fácil enfrentar nuestros problemas, pero al menos podemos intentarlo mientras vamos poco a poco, con la ayuda del Señor, transformando nuestro miedo, angustia y desesperación, en fortaleza, esperanza y fe.

Bendiciones y paz.
Autor: Juan Rafael Pacheco.

lunes, 1 de octubre de 2012

LOS ÁNGELES DEL CIELO


Servidores de Dios y amigos de los hombres: así son los ángeles.
¿Qué son los ángeles? Espíritus que contemplan a Dios y que viven en medio del misterio. Espíritus que participan de la alegría divina y colaboran en sus planes sobre los hombres débiles y necesitados de ayuda y protección.

Por eso los ángeles sufrirán, de algún modo que no podemos imaginar, al ver que hay corazones que se cierran al amor o pierden la esperanza. O se alegrarán profundamente cuando vean que otros corazones lloran por sus pecados e inician el camino del regreso al Amor de Dios.

El Evangelio nos habla de fiestas y gozo entre los ángeles por cada pecador convertido. Cada vida es importante para Dios, es observada por los ángeles, es bendecida de mil formas por compañeros celestes que nos invitan a soñar en el cielo que nos espera.

Dios desea que algunos ángeles intervengan en nuestras vidas. Por eso en la Biblia encontramos la narración de presencias angélicas. Especialmente bella resulta la salida de san Pedro de la cárcel, guiado por un ángel. Ya en la calle exclama fuera de sí: "Ahora me doy cuenta realmente de que el Señor ha enviado su ángel y me ha arrancado de las manos de Herodes y de todo lo que esperaba el pueblo de los judíos" (Hch 12,11).

Es muy conmovedora la historia de Tobit y de su hijo Tobías, a los que Dios envió el arcángel Rafael. Sólo al final, cuando Tobías ha podido contraer matrimonio con Sarra, y cuando Tobit ha recuperado la vista, los dos descubren que habían sido ayudados por un ángel.

El mismo Rafael les explica cómo había intervenido en sus vidas:

"Cuando tú y Sarra hacíais oración, era yo el que presentaba y leía ante la Gloria del Señor el memorial de vuestras peticiones. Y lo mismo hacía cuando enterrabas a los muertos. Cuando te levantabas de la mesa sin tardanza, dejando la comida, para esconder un cadáver, era yo enviado para someterte a prueba. También ahora me ha enviado Dios para curarte a ti y a tu nuera Sarra. Yo soy Rafael, uno de los siete ángeles que están siempre presentes y tienen entrada a la Gloria del Señor" (Tb 12,12-15).

Rafael añade inmediatamente, para tranquilizar a sus amigos, estas palabras llenas de afecto: "No temáis. La paz sea con vosotros. Bendecid a Dios por siempre. Si he estado con vosotros no ha sido por pura benevolencia mía hacia vosotros, sino por voluntad de Dios. A él debéis bendecir todos los días, a él debéis cantar. Os ha parecido que yo comía, pero sólo era apariencia. Y ahora bendecid al Señor sobre la tierra y confesad a Dios" (Tb 12,17-20).

Servidores de Dios y amigos de los hombres: así son los ángeles. Las palabras de Rafael nos llenan de alegría y esperanza. Con la ayuda angélica podemos descubrir el amor de Dios y recibir una fuerza concreta, oportuna, en tantas pruebas de la vida.

Por eso hemos de sentirnos invitados a dar gracias a Dios, porque no deja sin recompensa ningún gesto de amor que podamos ofrecer a los hermanos nuestros más necesitados. Porque nos envía, en ocasiones totalmente inesperadas, un ángel que rompa nuestras cadenas y nos lleve a descubrir lo inmensamente bello que es el Amor del Padre de los cielos.
Autor: P. Fernando Pascual LC.

jueves, 27 de septiembre de 2012

LOS PLAY BOYS “Tanto va el cántaro a la fuente….”


Han pasado muchos años en un silencio sepulcral, pero la paciencia tiene su límite, y paciencia han tenido y más.
No se puede tratar de confundir a estas nuevas generaciones que no vivieron esa década tan bonita de los sesenta en Badajoz; en esa época, y concretamente en el año 1961, nacen Los Play Boys en nuestra capital. Como hasta esa fecha se discute hoy, aquí en este mismo blog, en el enlace que pongo a continuación, pueden ver un artículo escrito por uno de los fundadores del mítico grupo, D. José Vela Ordóñez -Pepe Vela-, publicado en el año 80 en la revista anual que con motivo de la Ferias y Fiestas de San Juan editaba el Excelentísimo Ayuntamiento de Badajoz.

Fíjense en la pagina 55 de este articulo que comienza el la 49, como le digo es parte de una revista, pues en esa pagina 55, verán que el grupo se creo en 1961.
Pues como les digo, años y años callados. Pero para mí, la chispa que ha encendido la mecha y ha dado pie al escrito que a continuación les presento han sido las manifestaciones vertidas por D. Antonio Méndez Monroy -Tony Méndez-, en la entrevista que sobre los Play Boys le realizan en la televisión autonómica Extremeña, este mismo año y a la que asistieron todos los componentes del actual grupo, creo si mal no recuerdo, emitida el 11 de mayo, como digo de este año.
En la citada entrevista, dice Tony Méndez a pregunta del entrevistador al comienzo de la misma “que él tiene información y documentos sobre el grupo del año 1960”. Algo más incierto imposible cuando el grupo se crea en 1961, como ya he demostrado.
Habla también del tema del registro  del nombre de los Play Boys, (OEMP), y cuenta una historia que se da uno cuenta de que no hay nada de verdad en la misma.





Fotografía de la actuación de los Play Boys en la Escuela de Magisterio (Badajoz)


Poco después sale a relucir el tema de un episodio con una actuación de los Play Boys en el Salón de actos de la Escuela Normal de Magisterio de Badajoz; ese día estaba yo presente como un espectador más. En esa época, ni Tony estaba con los Play Boys -ya lo ven en la fotografía- y creo que ni los conocía. Bueno, pues él dice que estaba y que le cortaron la Luz. A preguntas del entrevistador, “¿Y Vds. que hicieron?”, Tony contesta, dando por sentado que él estaba ahí, “que nada… siguieron tocando”. Algo más inverosímil imposible. ¿O las guitarras funcionaban en esa época con pilas? Así podría seguir con la entrevista y la iría deshaciendo en su casi totalidad. Me consta que, un gran amigo mío, le ha ido desmenuzando la entrevista y  ha tenido que ser retirada de su página WEB; es que solo lo de decir que cortaron la luz pero ellos siguieron tocando desautoriza el resto de la entrevista.
Molesta a los creadores del Grupo que las mentiras o medias verdades vayan siempre con la coletilla “Me lo dijo mi amigo Nico” Q.E.P.D.
No se debe  utilizar a una persona ya fallecida para dar fuerza a una aseveración, ya que lo que hace es el efecto contrario al no poder replicar esta persona.
Los nuevos o actuales Play Boys han querido adueñarse de parte o de casi toda la historia del grupo y eso ni es normal, ni es justo, ni es honrado. Los éxitos que haya cosechado el nuevo grupo que los hagan suyos, pero desde luego, ni le quiten méritos a los primeros, ni traten de adueñarse de sus éxitos ni de su historia. No quiero, ni creo incurrir en falta de educación, que no falto el respeto a nadie por contar estas verdades; cuando la Historia se cuenta tal como sucedió no puede ni debe ofenderse  nadie, ya que cada uno es responsable de sus actos.
Y sin más dilación, paso a reproducirles el escrito que me ha sido enviado por los fundadores  de los Play Boys que continúan entre nosotros y el primer incorporado al primitivo trío, que lo firman como verán:
José Vela Ordóñez, Leocadio Mendiola Rodríguez y Jesús Herrero Fuentes.
El citado escrito, ha sido publicado en la pagina de Facebook "Los Play Boys de Jesus Herrero"
LOS PLAY BOYS (Sr. Don Antonio Méndez Monroy)
Siempre hemos observado tu ineptitud y tu poca categoría como cronista o biógrafo de este, nuestro grupo, Los Play Boys. Mentiras, o verdades a medias, con el único y hasta ya molesto argumento, "me lo dijo Nico" –q.e.p.d.-.
Y últimamente la polémica con Manuel Murillo, ¡¡quien da en la diana, eh!!. Éste te demuestra que falseas información y que relatas la historia a tu capricho cuando hablas de los antecedentes históricos de nuestro grupo en algún medio, que sólo nosotros          -como únicos creadores de esa historia, y como tal historia, inalterable- hemos vivido.
Entre otras cosas intentas falsear la fecha de nacimiento del grupo.
Y reduces una parte importante de la biografía de los PB a un escaso “grupo fundado por Nico Cruz –q.e.p.d.-, Pepe Vela y Leo Mendiola y aproximadamente 12 más…”, y todo esto “por deferencia”. Cronistas de esta calaña y de tan corta talla no necesitamos.
¿Tanto trabajo cuesta citar a todos los que aportaron –en mayor o menor medida- su granito de arena al éxito y consolidación de la marca P.B.? : Jesús Herrero, primer cuarto miembro del grupo y junto con Nico, una de las dos grandes voces solistas habituales en sus inicios; Emilio Alba, Puchi Escudero –q.e.p.d.-, Paco Bandeira, Patricio Valadés, Juanín Bote, Chely Núñez, José Ramón Mejías “Mexi”, …; ¿o te hacían sombra estas personas?
Unos u otros actuaron en TVE, ganaron los festivales del Guadiana, del Atlántico, de Llerena,… con versiones o con temas originales.
Claro, en toda esa época a ti ni se te conocía siquiera en la historia de los Play Boys, en la que  has querido meterte de la manera que fuera; pero te reiteramos, la historia es inamovible e implacable, no admite medias tintas como tú pretendes.
Y es que las biografías no pueden ser tendenciosas, ni hacerse de oídas; las autorizadas las escriben o dictan sus protagonistas. En la contraportada del LP nº 18 de la Historia de la música pop española, editado en 1985 por DIAL DISCOS –que suponemos en tu poder-, y dedicado en exclusiva al grupo, figura una bastante detallada.
Todos los relatos que haces y las mentiras que citas, para estas nuevas generaciones te pueden valer, no así para aquellos que hoy cuentan con 60 o 70 años, que conocieron la verdadera trayectoria del grupo que tú quieres o aparcar a la sombra o adueñarte de sus éxitos; de verdadera vergüenza hay que calificar tu comportamiento, al menos ante estos hechos.
Habla de tu tiempo y de tus fantasías, pero aquella primera época es exclusivamente nuestra, tú no estabas, no existías. Respétala, ni la ocultes, ni la manipules, ni te apropies de ella. Tal vez, cuando hayas sabido ponerte a la altura del resto, en todos los aspectos, podrás integrarte en la nómina de personas destacadas que han pasado por los PB. Hoy, desde luego, aún no.
Firman el presente escrito en Badajoz a 21 de Septiembre de 2012.
Don. José Vela Ordoñez  
Don. Leocadio Mendiola Rodríguez  
Don.  Jesús Herrero Fuentes

CINCO LLAVES PARA ENTRAR EN LA EUCARISTÍA


Dios quiere hacernos escuchar su voz y para eso necesita que le des la oportunidad de hacerlo.


SILENCIO


El silencio es un poder. Sin él es muy difícil escuchar. Nuestras eucaristías son deficitarias en silencio. Parece como si nos violentásemos por el simple hecho de estar unos segundos sin decir nada.

El silencio es el ruido de la oración.

El silencio, después de la homilía, es interpelación.

El silencio, después de la comunión, es gratitud al Dios por tanto que nos ha dado.

En el silencio se llena todo de nuestras intenciones personales, peticiones o deseos.

La música o el canto, los símbolos y otras cosas secundarias, nunca pueden ser una especie de tapagujeros que hagan más “digerible” la eucaristía. El silencio no es ausencia de...., es cultivar un lugar para que Dios nazca.


CONTEMPLACIÓN

La Eucaristía se hace más sabrosa cuando se la contempla. En el horizonte inmenso todo parece igual, pero cuando los ojos quedan fijos en él, surgen detalles que a simple vista parecían no existir.

Con la Eucaristía ocurre lo mismo. Es un paisaje que puede parecer todos los días igual. Sentarse, relajarse, olvidarse de lo que rodea lleva al alma contemplativa, a la persona contemplativa a vivir una serie de sensaciones que es la presencia escondida de Dios.

Yendo ellos de camino, entró en un pueblo; y una mujer, llamada Marta, lo recibió en su casa. Tenía ella una hermana llamada María, que, sentada a los pies del Señor, escuchaba su Palabra, mientras Marta estaba atareada en muchos quehaceres. Acercándose dijo: “Señor, ¿no te importa que mi hermana me deje sola en el trabajo? Dile que me ayude”. Le respondió el Señor: “Marta, Marta, te preocupas y te agitas por muchas cosas; y hay necesidad de pocas, o mejor, de una sola. María ha elegido la parte buena, que no le será quitada”. (Lucas 10, 38-42).


ORACIÓN

La oración y la eucaristía van de la mano como la cerradura se acciona con la llave. La eucaristía. El diálogo con Jesús se hace más fecundo después de haber escuchado la Palabra de Dios. Para que la Eucaristía resulte vibrante, no es cuestión de recurrir a la ayuda puntual del ritmo maraquero o guitarrero. En el diálogo de las personas está el crecimiento personal y comunitario. En la oración reside uno de los potenciales más grandes para entender, comprender y vivir intensamente la Eucaristía.

"Cuando oréis, no seáis como los hipócritas que son amigos de rezar de pie en las sinagogas y en las esquinas, para exhibirse ante la gente. Ya han cobrado su paga, os lo aseguro. Tú, en cambio, cuando quieras rezar, echa la llave y rézale a tu Padre que está ahí en lo escondido; Tu Padre que ve lo escondido te recompensará" (Mt. 6, 5-6).


CARIDAD

La fuente de la caridad perfecta es la Eucaristía. La fuente de la caridad que nunca se agota ni se cansa es la Eucaristía. En ella contrastamos nuestros personales egoísmos con las grandes carencias que existen en el mundo que nos rodea. Cada día que pasa es una oportunidad que Dios nos da para ofrecer algo o parte de la riqueza material o personal que podemos tener cada uno de nosotros.

Hay dos dimensiones que nunca podemos olvidar al celebrar la eucaristía: la caridad hacia Dios y la caridad hacia los hermanos. Amar a Dios con todo el corazón y con toda nuestra alma es subirse al trampolín, para saltar y amar, aunque se nos haga duro y a veces imposible, a los más próximos a nosotros. Y, esos próximos, ¡qué lejos los tenemos muchas veces del corazón y qué cerca físicamente!

Hoy, de todas maneras, está más de moda mirar horizontalmente al hombre que verticalmente acordarnos de que Dios existe.

«Bajaba un hombre de Jerusalén a Jericó, y cayó en manos de salteadores, que, después de despojarle y golpearle, se fueron dejándole medio muerto. Casualmente, bajaba por aquel camino un sacerdote y, al verle, dio un rodeo. De igual modo, un levita que pasaba por aquel sitio le vio y dio un rodeo. Pero un samaritano que iba de camino llegó junto a él, y al verle tuvo compasión; y, cercándose, vendó sus heridas, echando en ellas aceite y vino; y montándole sobre su propia cabalgadura, le llevó a una posada y cuidó de él. Al día siguiente, sacando dos denarios, se los dio al posadero y dijo: "Cuida de él y, si gastas algo más, te lo pagaré cuando vuelva." ¿Quién de estos tres te parece que fue prójimo del que cayó en manos de los salteadores?» El dijo: «El que practicó la misericordia con él». Díjole Jesús: «Vete y haz tú lo mismo».


ESCUCHA

Cuando Dios habla no nos da simple información: se nos revela. Su Palabra es un escáner por el que vamos conociendo el corazón de Dios, sus sentimientos, sus pensamientos y, también, lo qué tiene pensado para cada uno de nosotros. Lo qué quiere de cada uno de nosotros.

El Antiguo Testamento nos prepara a la venida de Cristo. Las epístolas y otras lecturas nos ofrecen las reflexiones de San Pablo y de otros contemporáneos sobre Jesucristo, su vida y su mensaje. El Evangelio nos da la clave de cada encuentro eucarístico. Es el punto culminante de toda la Liturgia de la Palabra. Es en este momento, cuando puestos de pie rendimos homenaje presente en la Palabra.

Le reclamaba una vez por la noche al Señor:
¿Por qué Señor no me escuchas?, si cada noche te hablo...
- ¿Por qué Señor no me atiendes?, cuando en cada momento te pido...
- ¿Por qué Señor no te veo?, si oro constantemente...
- En esta noche Señor hablo y hablo contigo, mas no siento tu presencia, ¿por qué Señor no me tomas en cuenta?


A lo que Dios contestó:
- Cada noche escucho tu clamor, cada noche trato de atender, cada noche trato de hacerme ver delante de ti, y quisiera cumplir tus deseos. Pero me hablas y pides muchas cosas, las cuales escucho con atención, sin embargo, en cuanto terminas de agradecer y de pedir lo que necesitas, terminas tu oración, sin darme oportunidad de hablar


Una conversación es un diálogo entre dos, muchas veces hablamos con Dios pero no nos damos un tiempo para escuchar su voz. ¿Alguna vez has tratado de hablar con alguien que no te deja decir ni una sola palabra? Pues bien, Dios quiere hacernos escuchar su voz y para eso necesita que le des la oportunidad de hacerlo, y solo entonces, al escuchar su voz y guardar silencio por un momento, tu oración será completa, y Dios cumplirá su promesa de darte todo aquello que pidas con fe.

Vosotros, pues, escuchad la parábola del sembrador. Sucede a todo el que oye la Palabra del Reino y no la comprende, que viene el Maligno y arrebata lo sembrado en su corazón: éste es el que fue sembrado a lo largo del camino. El que fue sembrado en pedregal, es el que oye la Palabra, y al punto la recibe con alegría; pero no tiene raíz en sí mismo, sino que es inconstante y, cuando se presenta una tribulación o persecución por causa de la Palabra, sucumba enseguida. El que fue sembrado entre los abrojos, es el que oye la Palabra, pero los preocupaciones del mundo y la seducción de las riquezas ahogan la Palabra, y queda sin fruto. Pero el que fue sembrado en tierra buena, es el que oye la Palabra y la comprende: éste sí que da fruto y produce, uno ciento, otro sesenta, otro treinta.
Autor: J.Leoz.

miércoles, 26 de septiembre de 2012

ENTENDER AL HOMBRE PARA ENTENDER LA CRISIS


Autor: Pablo Cabellos Llorente

            Con gran interés, he leído una reciente Tercera de ABC, titulada "El miedo que nos gobierna", cuyo autor es Antonio Hernández-Gil. Con erudición y belleza literaria, describe la situación de nuestra sociedad de manera realistamente descarnada y con la erudición propia del  hombre de leyes. Se mueve entre la piedad que proponía Rousseau para lograr el pacto de convivencia del Contrato social y el pesimismo de un Hobbes con el estado como gran Leviatán, surgido del miedo que busca seguridad.
            Acaba inclinándose por la realidad de que vivimos en una sociedad miedosa, regida por políticos que miran más su triunfo en las siguientes elecciones que el cambio necesitado por todos. Es un artículo brillante, pero un tanto cerrado a la esperanza, que sólo mantiene en unos posibles pensadores capaces de idear un diseño mejor para nuestro mundo.
            Sería pueril que yo intentase enmendar la plana a tan magnífico artículo, pero  me voy a permitir ofertar una posible complementariedad al escrito del ilustre jurista. Se puede completar lo que dice sobre la Revolución  Francesa y la Ilustración, sobre los hombres de pensamiento que forjaron a su entender la modernidad. Cita expresamente a Descartes, Pascal, Locke, Newton, Vico. Spinoza, Hume, Montesquieu, Rousseau, Voltaire y Kant. Es bien cierto que tanto estos personajes como los hechos referidos  dieron lugar a un nuevo régimen. Sus aportaciones fueron distintas y su influencia posterior también.

            Sin embargo, me atrevo a pensar en el aspecto negativo que han desarrollado esas ideas -en buena medida causa de lo que ahora sucede- porque a partir de las reflexiones de algunos de ellos se llega a este hombre moderno causante de la crisis, este hombre autónomo que, emancipado de Dios, pierde su sentido. Fue un logro la desvinculación de la sociedad respecto de las monarquías absolutas y de la Iglesia, un logro que alcanza a la misma monarquía y a la Iglesia que, desligada del poder temporal, puede sin rémoras dedicarse a lo que le es propio: ofertar las medios para alcanzar la santidad.
            Pero se produce un corte tan radical que tal vez confundió la separación de la Iglesia de los asuntos de este mundo con la liberación del hombre respecto a Dios, liberación que no es tal porque perdido el sentido, se vacía considerablemente la libertad. Algunos de esos autores -casi todos cristianos- han cooperado a la confusión del subjetivismo con la conciencia, ha sustraído de las actividades humanas toda referencia al Creador, han ido desechando la razón en beneficio de lo empírico, han originado progresivamente un Estado que lo es todo en detrimento de la persona...
            A mi entender, aquí radica en buena medida la situación de esta sociedad que se tambalea sin encontrar el lugar perdido. No persigo la vuelta a la Edad Media ni al confesionalismo religioso que ha hecho mal -en algunos casos continúa- principalmente a las religiones. Sí desearía encontrar una nueva sociedad en la que la persona ocupase el lugar que le corresponde como criatura de Dios. Y, a partir de ahí, se puede construir un nuevo orden con cabida para la esperanza. Enseguida aparecerá la objeción de que estamos en una sociedad plural en la que caben ateos y agnósticos. Por supuesto que caben, pero ahora mismo quienes estamos fuera somos los creyentes. Ahí voy.
            Hablando del personalismo de Juan Pablo II, ha escrito Juan Manuel Burgos: Si los hombres entienden qué es el bien y qué es el mal se debe exclusivamente a que lo han experimentado interiormente. Aquí es donde se encuentra el origen de la ética, lo que supone, en términos de teoría de las ciencias, que es sustancialmente autónoma con respecto a cualquier otra ciencia (y a la metafísica, en particular) ya que no toma de ninguna sus contenidos sino de una experiencia antropológica originaria. Esta filosofía personalista puede ser la aportación que se espera para construir una sociedad nueva que respete a todos.
            El personalismo surgió en la Europa de entreguerras con el objetivo de ofrecer una alternativa a las dos corrientes socio-culturales dominantes del momento: el individualismo y el colectivismo. Frente al primero, que exaltaba a un individuo autónomo y egocéntrico, remarcó la necesidad de la relación interpersonal y de la solidaridad; y frente al segundo, que supeditaba el valor de la persona a su adhesión a proyectos colectivos como el triunfo de una raza o la revolución, el valor absoluto de cada persona independientemente de sus cualidades. (Revista Española de Personalismo)
            De cara a una sociedad y unos estados vacíos de ideales, es necesario recuperar la ilusión de ser personas con la dignidad que nos corresponde, lo que probablemente sólo es posible restaurando la verdad sobre el hombre. Cualquier otra cosa sería comenzar la casa -también la economía- por el tejado. Juan Pablo II subrayó la primacía del hombre sobre los medios de producción, la primacía del trabajo sobre el capital y la primacía de la ética sobre la técnica. En el centro está la dignidad del hombre, que es siempre un fin y jamás un medio. Acierta Hernández-Gil al apelar a la razón.