"La buena conciencia es la mejor almohada para dormir." (Socrates)
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sábado, 7 de mayo de 2011

DERRAME CEREBRAL, OCHO FACTORES DE RIESGO

Vicios peligrosos

El café puede ser un desencadenante del problema. | Afp
  • La cafeína y el sexo aumentan las posibilidades de que se rompa un aneurisma
Isabel F. Lantigua | Madrid
Ocho actitudes cotidianas pueden poner en peligro la vida. Suena brusco, pero es real, aunque poco frecuente. Aproximadamente entre un 2% y un 3% de la población sufre un aneurisma cerebral a lo largo de su vida -debilitamiento de la pared de un vaso sanguíneo que hace que se abombe-. Pocas veces éste se rompe, pero cuando lo hace provoca un derrame cerebral que puede llegar a ser mortal. Investigadores de los Países Bajos han observado que el consumo de café, el ejercicio físico intenso, sonarse, tener relaciones sexuales, hacer fuerza al ir al baño, tomar refrescos de cola, sobresaltarse y enfadarse son factores que, por este orden, aumentan el riesgo de que se produzca la hemorragia cerebral.
"Todos estos comportamientos aumentan la presión sanguínea temporalmente y facilitan que el vaso inflamado por un aneurisma se rompa. Así de sencillo", explica Monique Vlak, neuróloga en el Centro Médico Universitario de Utrecht (Holanda) y coordinadora del estudio, que se publica en la revista 'Stroke'. Para detectar estos ocho factores 'peligrosos', el equipo preguntó durante tres años a 250 pacientes con aneurisma que sufrieron una hemorragia cerebral por sus hábitos y actitudes previos al derrame.
Observaron que lo más perjudicial era tomar café, pues quienes lo hacían tenían casi el doble de riesgo de que el vaso sanguíneo se rompiera durante la hora después de haber tomado la bebida que aquellos que no consumían café. Después, lo más peligroso para estos pacientes es hacer ejercicio intenso, sonarse fuertemente y tener sexo.
Muchos aneurismas pasan desapercibidos, porque no dan síntomas -salvo vómitos o visión borrosa en pocos casos-. Con las nuevas técnicas de neuroimagen se empiezan a detectar mejor, pero aún no están muy claras las causas por las que se producen. Hasta el momento se sabía que el hecho de ser mujer y la hipertensión eran factores de riesgo, a los que ahora se suma estos ocho.
"Para las personas con un aneurisma que es demasiado pequeño para poder tratarlo o que está localizado en una zona de difícil acceso para intervenir, es mejor prevenir que curar. Evitar comportamientos de riesgo puede ser su seguro de vida", explica a ELMUNDO.es Ale Algra, del Departamento de Neurología del Centro Médico de Utrecht y otro de los autores del trabajo. "Si suprimen el café pueden reducir en un 10% el riesgo de ruptura del vaso sanguíneo o en un 4% si toman laxantes", indica.
Estas hemorragias causan la muerte a la tercera parte de los pacientes que las sufren y dejan a otro 20% en una situación de dependencia total.

jueves, 5 de mayo de 2011

Los beneficios de caminar para la salud


Caminar puede ser un buen ejercicio si se hace correctamente, pues es de intensidad moderada y accesible a casi todas las personas, cualquiera sea su condición física inicial. Se puede hacer sin un equipo especial, solo o acompañado, todo el mundo sabe hacerlo, es seguro y no hay que trasladarse a un lugar específico para practicarlo.
Además, se puede introducir en la vida cotidiana sin alterar las costumbres ni hábitos de las personas.

Los beneficios de la caminata
Según la mayoría de los estudios, los beneficios corporales de realizar una caminata diaria de 30 minutos se traducen en beneficios cardiovasculares en cuanto a una menor frecuencia de infartos de miocardio, diabetes del adulto, accidentes cerebrovasculares e hipertensión arterial.
La actividad física moderada ha mostrado beneficios en la osteoporosis, la artritis, las caídas en los ancianos, y también efectos sobre el peso y los lípidos aunque más modestos. Además, es buena para la mente, ya que hay cierta evidencia de que el ejercicio moderado ayudaría en la depresión y en ciertos estados de ansiedad.

Para comenzar…
El período mínimo necesario para obtener efectos saludables es de diez minutos diarios. Según un estudio realizado en Buenos Aires, el 85 % de la gente entre 15 y 69 años camina por lo menos 10 minutos seguidos al menos una vez por semana. Por esto mismo y siguiendo el consejo general de “algo es mejor que nada” y “más es mejor que poco”, se puede empezar por hacer períodos de 10 minutos cada día. El ritmo debe ser más rápido que el de caminar mirando vidrieras, con paso firme y regular, y que a la vez se pueda hablar sin que se corten las palabras.
Realizar tres períodos de 10 minutos podría ser un objetivo inicial, aunque conviene saber que la mayoría de los estudios que mostraron beneficios fueron hechos con 30 minutos seguidos. No hay que olvidar hacer ejercicios de elongación en forma periódica.
Unas pocas semanas bastan para mejorar los aspectos circulatorios y reducir la resistencia a la insulina, a la vez que mejoran la tonicidad. En tanto, para bajar de peso o mejorar el perfil de los lípidos se requieren algunos meses.
La conveniencia de beber líquido durante la caminata, depende del tiempo dedicado a la misma y de las condiciones climáticas. En líneas generales hasta 30 minutos se podrían hacer sin necesidad de ingerir agua, salvo que se haga en pleno verano en las horas de mayor calor.

Un ejercicio para todas las edades
En principio no hay restricciones para ancianos ni enfermos, de hecho los cardiólogos recomiendan caminar a los pacientes coronarios o que hayan tenido by-pass. La única salvedad es que en los ancianos hay que evaluar el balance, equilibro y si existen impedimentos de tipo ortopédico. Por ejemplo si hay una artrosis de cadera importante, el hecho de caminar puede provocar dolor, por lo habría que hacer otro tipo de ejercicio, como la bicicleta fija.
En cuanto a los que tienen diabetes, enfermedades cardíacas o pulmonares deberían pasar por el médico antes de iniciar un programa de caminatas.
Se debe tener precaución ante la presencia de lesiones agudas en miembros inferiores y ciertos problemas ortopédicos como artrosis de rodilla o hernia de disco lumbar, y algunas personas que tienen pie diabético. Hasta que esos problemas no se solucionen podría ser mejor cambiar a otro tipo de ejercicio.

martes, 3 de mayo de 2011

La hora de un infarto influye en su pronóstico

Un estudio muestra que el matutino es el más mortal
AINHOA IRIBERRI MADRID
La rapidez entre el diagnóstico y el tratamiento de un infarto es vital. thinkstock
Cuando un paciente de infarto llega al hospital se activan todos los mecanismos de emergencia. En esta dolencia, es clave la rapidez entre el diagnóstico y el tratamiento, casi siempre consistente en un cateterismo la inserción de un catéter a través de la ingle para abrir la arteria obstruida que ha provocado el infarto, pero, según un estudio español publicado hoy en Heart, en algunos momentos del día es todavía más importante que en otros.
La hora con peor pronóstico para el ataque cardiaco es entre las seis de la mañana y las 12 del mediodía, según ha demostrado un equipo de investigadores del Centro Nacional de Investigaciones Cardiovasculares (CNIC) y el Hospital Clínico San Carlos de Madrid, dirigidos por el cardiólogo Borja Ibáñez.
Los autores analizaron a 811 afectados por un ataque cardiaco
Los autores del trabajo analizaron la extensión del músculo cardiaco afectado por el infarto a través de la liberación de dos biomarcadores de daño cardiaco (CPK y troponina) a la sangre circulante. Lo hicieron en 811 pacientes admitidos en el Hospital Clínico San Carlos con diagnóstico de infarto de miocardio (se excluyó a los que habían sufrido este accidente vascular anteriormente). Los investigadores se fijaron principalmente en dos parámetros: la hora en que se había detectado el infarto (se dividió el día en cuatro periodos de seis horas y se asignó a cada individuo a uno de esos grupos) y el porcentaje de tejido dañado, es decir, el grado de afectación del infarto.
El trabajo desveló que el tamaño del área infartada era significativamente mayor cuando el ataque al corazón se producía en la transición entre sueño y vigilia, es decir, entre las seis de la mañana y el mediodía. Según señaló Ibáñez, "el tamaño del infarto es el marcador más importante que existe de eventos clínicos posteriores, incluyendo la mortalidad".
Consecuencias clínicas
Los hospitales deberían aumentar su personal fuera del horario laboral
Por esta razón, el autor principal considera que el hallazgo tiene consecuencias clínicas. Así, opina que a esas horas se debería prestar especial atención a reducir al máximo el tiempo entre el diagnóstico y el tratamiento, así como incrementar el personal presente en las salas de cateterismos o disponer de centros con salas donde se efectúe este procedimiento las 24 horas del día. "La práctica habitual en todo el mundo es tener localizado en horario extralaboral al especialista, que se presenta muy rápido en la sala tras un aviso", apunta Ibáñez.
Las razones que explican estas diferencias en gravedad no se conocen, aunque se sabía que la fisiología cardiovascular está modulada por el ritmo circadiano o los periodos de alternancia de sueño y vigilia. El hallazgo publicado hoy en Heart había sido recientemente descubierto en ratones. Los autores señalan que, en su análisis, observaron que había una mayor incidencia de hipertensión en periodo de transición de la noche al día y vieron también una tendencia hacia una mayor incidencia de diabetes.
Ibáñez subraya que en su estudio se ha "descontado" el posible impacto que pudiera tener el hecho de que, al producirse los infartos a horas tan tempranas, tardaran más tiempo en descubrirse y diagnosticarse.
Enlace articulo original: http://www.publico.es/ciencias/373263/la-hora-de-un-infarto-influye-en-su-pronostico